Estado de shock...

Cuando pensaba que el fin de semana no podía ir mejor, fui al cine y vi Infiltrados. ¿Nunca habéis querido aplaudir al ver una peli pero no lo habéis hecho por vergüenza? Exactamente eso me ha pasado pero no con esta película, sino con cada una de las escenas de esta película. Alguien dijo tras estrenarse El Aviador (y mucho antes también), que Scorsese estaba en declive. Espero, por su propio bien, que haya cambiado de idea, porque si hace falta voy yo y le parto las piernas.

Scorsese nunca ha tenido declive, ha hecho lo que le ha salido de la punta del cimborrio, y me alegro mucho de ello, porque fruto de su propia voluntad le han salido mierdas como Gangs of New York y obras maestras como Infiltrados. Por poner ejemplo cercanos en el tiempo, que si echamos la vista atrás, tendría que escribir este artículo en reclinatorio.

Este film está basado en Infernal Affairs, una película asiática que allá en el año 2002 fue una nueva esperanza para el cine de acción asiático más allá de John Woo y gente por el estilo. Yo no he visto la original, y no puedo hablar con perspectiva. Pero desde luego entiendo la postura de la gente que ha visto la original defendiéndola. También espero que entiendan la mía, que no he visto la original, defediendo ésta. Aunque la tensa, fría y en definitiva mala relación que tiene un servidor con el cine asiático me hace pensar que aún viéndola, voy a preferir a Scorsese.

Un saludo!